miércoles, 6 de octubre de 2010

Cómo estudiar leyes (para oposiciones)

Estudiar un ley para una persona que no haya tenido contacto previamente con el mundo legal puede ser una tarea muy dura. Los tecnicismos legales, la terminología arcaica de algunas leyes decimonónicas todavía vigentes, pueden provocar que a primera vista no seamos capaces jamás de entender y preparar una oposición. Vamos a daros algunos consejos para que el estudio de las disposiciones legales que son materia de examen sea más provechoso.

COMPRENSIÓN LECTORA

Esto parece obvio, si no entendemos lo que estudiamos se nos hará mil veces más difícil aprenderlo. Por qué entonces muchos opositores insisten en memorizar leyes sin comprender perfectamente muchas partes de las mismas. Está claro que tendremos que memorizar y recordar muchas cosas de cara al examen, pero esta tarea será infinitamente más fácil y viable cuanto mejor entendamos lo que estudiamos.

Para esta misión nuestro principal aliado será el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, y tampoco está de más tener un glosario de términos jurídicos a mano.

Parece básico pero la mayoría de las palabras que vamos a encontrar en muchas leyes, y que son propias de la jerga legal, viene recogidas en el diccionario bajo el prefijo Der. (relativo al derecho). Por ejemplo: si buscamos la palabra providencia, además de su primera acepción (Disposición anticipada o prevención que mira o conduce al logro de un fin), podemos encotrar la siguiente:

Der. Resolución judicial que tiene por objeto la ordenación material del proceso.

De esta forma cuando leamos en algún artículo tal trámite se despachará por providencia, al menos conoceremos su significado. Hay que tener el diccionario siempre a mano impreso o por internet, y no caer en la pereza y dejar de buscar y aprender todo, al principio lo usaremos mucho pero conforme avancemos en la materia su utilización decrecerá enormemente.

APRENDIZAJE POR DESCUBRIMIENTO

Cuantas veces hemos descubierto algo que desconocíamos a través de nuestra propia curiosidad, que nos ha movido a investigar sobre ese tema concreto. Lo que así hemos adquirido se nos queda grabado en nuestro conocimiento con mucha más facilidad que la producida por la repetición recurrente de ese mismo concepto o tema hasta que lo aprendemos. Es muy útil a la hora de prepararse buscar el lado práctico del temario que estudiamos, esto se facilita con las llamadas e-actividades como las que diseñamos en nuestros cursos. 

Un ejemplo:
Imaginemos que estamos estudiando el Título II (De la corona) de nuestra Constitución, en concreto:

1. La Corona de España es hereditaria en los sucesores de S. M. Don Juan Carlos I de Borbón, legítimo heredero de la dinastía histórica. La sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura y representación, siendo preferida siempre la línea anterior a las posteriores; en la misma línea, el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el varón a la mujer, y en el mismo sexo, la persona de más edad a la de menos.

Podemos optar por leer y leer esto, esquematizarlo y subrayarlo o realizar la e-actividad de investigación que proponemos y que hemos extraido de nuestro curso de Tramitación Procesal, a través de la cual se estudian tanto lo anteriomente mencionado como la Reforma Constitucional:

Con el nacimiento de la primera hija del Príncipe de Asturias se suscitó la cuestión de la posibilidad de que el segundo hijo o posteriores de éste pudieran ser varones, adelantando en el orden de sucesión a la Infanta Leonor.

En relación a este tema, investigad y leed la Constitución, y contestad a las siguientes preguntas:
¿En qué Título y artículos de la Constitución se regula la precedencia del varón sobre la mujer en la sucesión a la Corona?

Al ser necesaria una reforma Constitucional, ¿qué procedimiento debería seguirse para sacar adelante dicha reforma, y que la Infanta Leonor fuera la primera en la línea de sucesión, independientemente del sexo de sus hermanos?

Con esto conseguimos propiciar un interés en el estudio basado en una realidad social que a todos nos es conocida y cercana. Al tener curiosidad por leer y averiguar lo propuesto, leeremos el artículo anterior de forma diferente, ya que ahora queremos leerlo y aprender lo que en el mismo se dice. El aprendizaje así realizado quedará en nuestra memoria almacenado de forma más fuerte y durarera al asociar el texto legal al caso práctico y familiar planteado.

Esto son sólo dos aspectos muy básicos para obtener más rendimiento en el estudio. Seguiremos publicando artículos sobre otros aspectos similares más adelante.

2 comentarios:

  1. Es curioso cómo memorizamos sin darnos cuenta las cosas que nos gustan o que nos llaman la atención. Si estoy leyendo el periódico y una noticia me rusulta curiosa, podría recordarla perfectamente al día siguiente con sólo haberla leído. Lo dificil es que cuando uno tiene que memorizar tanto, como en el caso del estudio de las leyes, la monotonía sea nuestra compañera y como consecuencia la pérdida de interés.
    Me parece estupendo que se hagais e-actividades para que así no sea tan monótono el estudio.
    Muchas gracias.

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