sábado, 28 de agosto de 2010

Reparto de preguntas de examen por leyes - Auxilio Judicial

Dada la gran aceptación que ha tenido la anterior entrega sobre el reparto de preguntas de examen entre las distintas leyes que componen el compendio legislativo a estudiar en las pruebas de Tramitación Procesal, hemos repetido el trabajo para el cuerpo de Auxilio Judicial. En general el reparto se asemeja al de Tramitación si bien tiene algunas particularidades que comentaremos a continuación.

En el examen del año 2003 dominan la LOPJ, la LEC y la CE; entre estas tres normas acaparan el 60% de las preguntas, y sólo la LOPJ más de la cuarta parte. Si sumamos a estos tres textos la LECr, la LRC(o el Reglamento, que ambos se incluyen en este epígrafe), el RD1451/2005 y el RD796/2005, llegamos al 80%. El resto se reparte homogéneamente entre las demás normas del gráfico. Cabe destacar el apartado de Otros con 6 preguntas, algunas de ellas fuera del nivel que a priori se esperaría para el cuerpo de Auxilio Judicial.

El siguiente examen analizado ha sido el de la convocatoria de 2006 (celebrado en año 2007).  La LEC y la LOPJ se reparten más de la mitad de las preguntas del examen (en concreto el 54%), seguidas por la LECr(12%), la CE (6%) y la LJCA y la LPL con un 5% cada una. Entre todas las mencionadas  un 84 % de las preguntas de examen. Parece que la tendencia observada en Tramitación, en cuanto  a una mayor dispersión entre las distintas leyes, se confirma en este cuerpo, si bien es cierto que todavía el dominio de las dos leyes mayoritarias es muy importante.

En el examen de 2009 sí que parece consolidarse esta tendencia. Tan sólo mantiene su supremacía la LOPJ que sigue reuniendo por si misma casi un tercio de las preguntas del examen. Decrece la importancia de la LEC en favor de a CE, y de las demás leyes minoritarias que, cuando antes se llevaban una o dos preguntas, en este examen consiguen más de tres preguntas cada una. Es el caso del Tratado de la Unión Europea (TUE), con muy poca presencia hasta ahora, y que en ete examen aparece con 4 preguntas. También cabe destacar el Reglamento de Archivos (RD 937/2003) con otro 4% y el apartado de Otros con un 6%, que incluye dos preguntas del Plan Concilia y una de la Ley Orgánica del Menor que nos han sorprendido por parecernos que están un poco fuera de contexto en cuanto al nivel de este cuerpo se refiere.

En resumen, parece que al igual que en el análisis anterior, la tendencia es a repartir cada vez más las preguntas entre las leyes materia de examen. Para aprobar hay que dominar la LOPJ, LEC, la CE y la LECr, y conocer bien el RD1451/2005, el RD 937/2003 y la LJCA. En función del tiempo de que dispongamos, iremos entremetiendo el resto de leyes como mejor nos venga para ir cubriendo cada vez más temario.

Os dejamos el enlace al estudio completo con cifras y gráficos totales de los tres exámenes. Esperemos que os sirva para planificar vuestros estudios.

martes, 24 de agosto de 2010

Así se reparten las preguntas en el examen de Tramitación Procesal y Administrativa

Hemos realizado un pequeño análisis sobre cómo se reparten las preguntas de los examenes de tramitación de 2003, 2007 y 2009 por los distintos textos legales que hay que estudiar para preparar las pruebas selectivas.
Sin pretender realizar un estudio científico exhaustivo, creemos que los resultados sí que resultan interesantes y llamativos. Pueden orientaros de cara al estudio y a hacer más hincapié en ciertas normas que cubren por sí mismas más de 80% de las preguntas de examen.

En la gráfica de 2003 observamos que entre las Leyes de Enjuiciamiento Civil(LEC), la Ley de Enjuiciamiento Criminal(LECr) y la Ley Orgánica del Poder Judicial(LOPJ) se abarca el 69% de las preguntas del citado examen. Si añadimos la Constitución(CE), el Reglamento de Ingreso del Personal Funcionario al Servicio de la Admón. de Justicia (RD1451/2005) y la Ley sobre el Registro Civil(LRC), llegamos al 89% del total de preguntas. El 11% restante se reparte entre la Ley de la Jurisdicción Contencioso-Adminstrativa (LJCA-3%), Ley Orgánica del Tribunal del Jurado (LOTJ-2%), Ley de Órganos de Representación (LOR - 3%), Ley de Procedimiento Laboral (LPL-1%) y la Ley de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres(LIEMH-1%). En el epígrafe otros se han englobado otras leyes que no forman parte habitual del temario de manera directa. En este caso apareció una pregunta de la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas, norma que no ha vuelto a aparecer en los exámenes siguientes.

Parecida es la distribución correspondiente al año 2007. La LOPJ, LEC, LECr, LRC, CE y el RD 1451/2005 acaparan el 77% del total de preguntas de examen. En el resto de leyes hay más reparto que en el examen del año anterior, repartiéndose las 23 cuestiones restantes entre 14 normas o acuerdos. Sin duda esta dispersión complica mucho el estudio de las pruebas selectivas ya que debemos tener en cuenta muchas leyes a la hora de estudiar, creciendo considerablemente la materia objeto de estudio.

Y en el año 2009, la dispersión apuntada en el 2007, crece y con ella el número de normas a estudiar. En este gráfico observamos que las leyes que al principio acaparaban casi el 90 % de las preguntas, sólo llegan al 66% en este examen. El resto de preguntas se distribuyen entre 12 normas, entre la que destacan la LPL con un 7%, la LOTJ con un 6% y el RD937/2003, de modernización de los archivos judiciales, con un 4%. Si sumamos estas tres disposiciones con las anteriores, llegamos a cubrir el 83% de las preguntas del examen.

Parece pues que la tendencia es seleccionar las cuestiones de examen de una gran cantidad de normas diferentes, si bien se mantiene el núcleo principal formado por las leyes procesales y la LOPJ, que aportan la mayoría de las preguntas.

Es obvio que cuantas más leyes abarquemos mejor preparados iremos al examen, pero también es cierto que puede suponer una pérdida enorme de tiempo tener en cuenta leyes marginales, en lo que al temario oficial se refiere, y que sólo han aportado una o dos preguntas de las 300 analizadas. Ejemplos claros de esto último son el Reglamento 1/2005 del Consejo General del Poder Judicial, la Ley 18/2006 para la eficacia en la Unión Europea de las resoluciones de embargo y de aseguramiento de pruebas en procedimientos penales, o el Acuerdo de Schengen, que sólo han aportado una pregunta cada una de ellas.

Resumiendo, este análisis pretende dar una visión global de las leyes que debemos conocer más en profundidad, ya que aportan la mayoría de las preguntas al examen. Entre el resto, y dependiendo del tiempo de que dispongamos, elegiremos las más relacionadas directamente con el temario. Algunos acuerdos como la Carta de Derechos de los Ciudadanos ante la Justicia, son fáciles de estudiar sin un texto complicado y su tendencia es a aportar de 1  a 3 preguntas al examen. La estrategia de selección la estableceremos nosotros y para este fin los gráficos aportados pueden sernos de enorme utilidad.


jueves, 19 de agosto de 2010

Oposiciones colaborativas: La nueva era

Atrás han quedado las largas horas estudiando en solitario nuestras oposiciones, frente a los interminables libros de recopilaciones legislativas. Con la venida de internet y las redes sociales esta forma de prepararse unas pruebas selectivas puede y debe cambiar. ¿Qué es más productivo el estudio de memoria de un libro de 1000 páginas, o la preparación de los temas contenidos en los mismos, en el seno de una comunidad de aprendizaje en la que cada miembro apoye y ayude a los demás?


Sin duda la segunda opción sería la más beneficiosa ya que, por poner un ejemplo,  no es lo mismo aprenderse de memoria la frase "El ejercicio de las competencias de la Unión se rige por los principios de subsidiariedad y proporcionalidad", que plantear la misma en un foro, en un chat pedagógico o en una discusión a través de twitter u otra de las redes sociales de su estilo. Es un hecho que al debatir sobre un tema debemos reflexionar sobre el mismo y, si no queremos dar una opinión infundada, indagar sobre su significado y otros aspectos de la materia en cuestión. Al participar en estas discusiones estamos aprendiendo sin darnos cuenta.

Estas técnicas de aprendizaje social las aplicamos al estudio de una oposición, si bien es cierto que dado el tipo de examen al que nos vamos a enfrentar, se hace imprescindible una memorización de muchos de los contenidos del temario, pero en este punto volvemos al principio: ¿cómo crees que memorizarás mejor la frase planteada anteriormente repitiéndola mil veces o intentando a través de la interacción con tus compañeros de grupo entender la frase plenamente en su significado, y debatir sobre qué quiere decir, en qué contexto y con qué repercusión para nuestra sociedad?

Todo lo anterior parece perfecto pero el gran problema de aplicar estos métodos al mundo de la preparación de oposiciones está en la esencia propia de este sector formativo: la competitividad. Mi compañero es mi rival y puede ser el que mie quite la plaza, por tanto no debo darle ningun aventaja ni faciltarle mis materiales ni mis fuentes y así tendré más posibilidades de superarle.Este pensamiento está generalizado entre la inmensa mayoría de los opositores, y es el que queremos erradicar por las razones que a continuación vamos a explicar.

Por ejemplo, si partimos de que han ofertado 100 plazas, y se han presentado 10.000 solicitudes, el ratio inicial de opositores por plaza es de 100:1 (100 aspirantes por plaza). Está probado por las cifras de presentados que en unas opsiciones de ingreso libre se presentan al primer examen aproximadamente la mitad de los que presentaron la instancia, lo que nos dejaría la proporción en 50:1. Lo último que debemos tener en cuenta es el dato (subjetivo) de los que se han preparado adecuadamente y dedicándole el tiempo necesario las pruebas selectivas. Podríamos estimar que al final pueden quedarnos 30 candidatos de 100 con opciones reales a conseguir la plaza (30:1). La cosa cambia respecto a los primeros datos.

Estas cifras nos indican que para conseguir nuestra plaza deberíamos se mejores que los 29 opositores restantes. A priori, vistos los beneficios que tiene estudiar colaborativmente en grupos reducidos compartiendo materiales, trabajos, elaborando los supuestos juntos e incluso los tests (aunque es importante también realizar tests en solitario como ensayo para el examen), dispondríamos si cabe de más ventajas respecto de las personas que estudian totalmente en solitario, que por ahora son mayoría.

Otra gran ventaja de este tipo de estudio en grupos es la motivación extra que puede darnos el integrarnos en un grupo de trabajo. Los compañeros se apoyan y motivan mutuamente. Cuando uno piensa que el estudio lo supera y se plantea dejarlo, el grupo puede motivarle y darle las fuerzas y los ánimos que a él en solitario le puedan faltar.

Por último, los métodos comentados nos hacen acercar nuestro estudio a la realidad, a nuestros problemas cotidianos y hacerlos nuestros en la práctica. Si leemos fríamente la frase expuesta en el segundo párrafo posiblemente entendamos qué quiere decir cada palabra, pero no su significado real. Necesitamos pornerla en práctica para entender lo que implica y qué quiere decir, por ejemplo, aplicándola a algún problema cotidiano que hayamos tenido: el otro día leí que condenaron a un señor por comerse unas flores, esto podría ir contra el principio de proporcionalidad, ya que no me parece adecuada la pena al delito. Puede que sólo con leer este pensamiento se comprenda mejor cuál es la esencia del principio de proporcionalidad que con todo un artículo técnico. Como dice el vídeo que mostramos, Nadie sabe más que todos juntos.

Las razones para cambiar nuestra forma de estudiar son muchas y las ventajas aún mayores.

(Recomendamos este artículo sobre uno de los pioneros de este tipo de enseñanza: Celestin Freinet, sobre cuya vida y obra trata el vídeo que adjuntamos)


miércoles, 11 de agosto de 2010

In Custodia Legis. Library of Congress

La Librería del Congreso de los Estados Unidos edita un blog bastante interesante sobre legislación. Se titula In Custodia Legis y si la diferencia de idioma no te es un problema encontrarás artículos que merece la pena leer sobre legislación. Además como dice en su presentación pretende ser más que una biblioteca.

Bienvenidos. Os deseamos lo mejor.

domingo, 8 de agosto de 2010

Cómo preparar unas oposiciones

Preparar una oposiciones requiere constancia, esfuerzo, disciplina y planificación. Puedes optar por preparártelas por ti mismo o acudir a algún centro especializado en la preparación de oposiciones que te proporcione todo lo necesario para conseguir tu plaza como funcionario.
Con la crisis que atravesamos se han multiplicado el número de personas que buscan una salida profesional en la función pública. Paralelamente ha surgido una oleada de preparadores y academias no profesionales que buscan el negocio inmediato, aprovechándose del desconocimiento de muchos de los que llegan a este mundo de la preparación de pruebas selectivas.
Academia Directa cuenta con un equipo de profesionales que te proporcionarán todo lo necesario para que llegues a buen fin en tu preparación. En estos momentos estamos preparando las pruebas de acceso a Tramitación Procesal y Administrativa y a Auxilio Judicial. Nuestro curso de preparación incluye:

- el temario acutalizado (basado al 100% en la ley; no te fíes de temarios que no recogan las leyes literales a estudiar pues las preguntas de examen se redactan de acuerdo con éstas)
- actividades de preparación para cada tema

- clases virtuales semanales (como mínimo una a la semana)

-foros de debate sobre los temas que se estudian

- tests del tema, tests acumulativos (que incluyen preguntas de todos los temas vistos hasta el momento) y tests tipo examen

- supuestos prácticos

y mucho material complementario que facilite el estudio, todo guiado y asistido por profesionales del derecho, informática y expertos en pedagogía.

Si vas a prepararte por tu cuenta te recomendamos que:

- Recopiles toda la legislación ¡ACTUALIZADA! necesaria para preparar las pruebas. Hay muchos libros por ahí que no tienen las leyes al día y esto puede ser un grave problema. Puedes encontrar toda la legislación para las pruebas de justicia en el nuestra web.

- Conforme vayas leyendo la ley debes ir haciéndote esquemas o resúmenes con lo que sea materia de examen (No todas las leyes se deben estudiar íntegras, depende de los temarios de cada uno de los cuerpos).

- Debes comprender y entender bien todo lo que estás estudiando. Memorizar por memorizar no sirve de nada. Debes aprenderte el temario, no memorizarlo. Para ello no dudes en consultar por internet, en sitios de confianza, cualquier duda o aspecto que no entiendas de las leyes que estás estudiando. 

-  Ten en cuenta que el examen más compicado y el que más opositores elimina es el test sobre el temario.  Los libros de tests están bien pero tienen un número muy limitado de tests por temas. En Academia Directa puedes suscribirte para hacer todos los tests que quieras. Nuestra base de datos consta en estos momentos de 3000 preguntas y vamos añadiendo más cada día. Los tests mezclan aleatoriamente las preguntas e incluso las respuestas dentro de las preguntas para que cada vez el test sea diferente. Tenemos programados tests sobre las materias de los temas individualmente, tests acumulativos que incluyen preguntas de todos los temas anteriores al que se está viendo (por ejemplo, si estás estudiando el tema 4 puedes hacer tests acumulativos con preguntas de los temas 1 al 4) y tests tipo examen. Esto provoca un repaso activo y constante de todo el temario.

- Debes hacer también supuestos prácticos y, si se pide en la prueba práctica, tener un buen nivel mecanográfico tanto de pulsaciones como de corrección al escribir, así como conocimientos del procesador de textos en el que se deba realizar la prueba. Nuestro método te ofrece actividades prácticas en cada tema y en aquellos temas susceptibles de ser materia de un supuesto de examen, harás varios de estas actividades. También puedes conseguir dos métodos libres de mecanografía y tutoriales del procesador de textos.

- Por último, debes de tener la fuerza suficiente para no decaer en tus estudios. 

En resumen, el camino es difícil pero, si estás dispuesto a prepararte en serio, merece la pena.

Prueba nuestro método un mes y si no te convence puedes darte de baja cuando quieras.

Aunque estamos seguros de que si nos pruebas te quedarás con nosotros.